Miramos el territorio desde un punto de vista ajeno, pero reconocible en elementos particulares de una imagen; la repetición de componentes característicos en la escena, su importancia y reconocimiento en el conjunto hacen del territorio como sumatoria de partes un lugar potencialmente singular del individuo donde actuar.
Reconocer diferentes situaciones en el territorio mediante la mirada ajena, clasificarlo, contextualizarlo y transformarlo en el instrumento de enlace y desenlace de posibles transformaciones para poder saltear y descontextualizar condicionantes característicos de un lugar, aprovecharlas a nuestro favor y poner en cuestión procesos que se desenlacen en sitios puntuales; mirar desde y hacia, y operar con una mirada crítica para accionar procesos particulares que vuelvan a introducirse en la escena a través del individuo.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)